Escrito por Cresencio Rodriguez-Delgado and Daniel Gligich
La inauguración del cuadragésimo quinto presidente de los Estados Unidos el 20 de enero, provocó la manifestación de millones de personas, quienes llenaron las calles el dÃa siguiente.
ZacarÃas González, un estudiante de posgrado de historia en Fresno State, dijo que el movimiento hacia la acción ocurrió los meses antes de la toma de presidencia de Donald Trump.
La inauguración era otro recuerdo del odio de Trump durante su campaña para ser presidente, dijo González.
“Personalmente, no siento que la inauguración tenÃa más importancia que su campaña general”, dijo González el sábado. “Estamos listos para intentar de involucrar a los estudiantes”.
González está encargado como la silla de reclutamiento para Chicano Latin American Studies Student Association, mejor conocida como CLASSA.
Trump, como nuevo presidente, se le considera antipático a los grupos étnicos por su retórica. González ve los problemas que los estudios étnicos tienen como poca inscripción. Eventos organizados por CLASSA también tienen poca presencia, él dijo, agregando que hay una correlación entre la nueva administración y con el estado de ánimo en el campus.
“La apatÃa es nuestro mayor oponente, es nuestro mayor obstáculo en el campus y en la comunidad también”, González dijo. “La misma apatÃa que permitió a [Trump] ser elegido corre incontrolable en nuestro campus”.
Las primeras controversias de Trump incluyeron el uso de un lenguaje fuerte para describir a algunos inmigrantes mexicanos y estadounidenses musulmanes.
“El dio el tono cuando anunció por primera vez su campaña, vilipendiado no sólo a Chicanos y Latinos, sino a personas indocumentados en este paÃs”, dijo González. “Es lo más personal para nosotros por qué todos tenemos familiares y amigos y amistades aquà que son indocumentados y vemos miedo”.
Trump eliminó a todos los crÃticos con partidarios leales, algunos llamándose “la mayorÃa silenciosa”.
“Estamos más decididos que nunca”, dijo González. “El hecho de que [Trump] es elegido presidente y que ahora ha sido inaugurado, sentimos que tenemos un fuego debajo de nosotros”. La administración de Trump no debe de ser tratada ligeramente, serÃa ignorante subestimar lo que realmente puede hacer”.
González citó el congreso controlado por los republicanos y la anticipación de Trump de nombrar varios jueces para la Corte Suprema los Estados Unidos. El cree que esa potencia podrÃa descarrilar los progresos de las administraciones anteriores. González también dijo que el control en el nuevo gobierno proviene “no sólo de los conservadores, pero por el momento hay un movimiento conservador que ha llegado a poder”.
El nuevo desafÃo que enfrentan los lÃderes estudiantiles como González, es resistir las decisiones del nuevo gobierno que “podrÃan realmente dar la marcha hacia atrás en el progreso que ya hemos logrado”.
Gabriela Encinas trabaja con estudiantes indocumentados como la coordinador del Dream Success Center. Los estudiantes con quien ella trabaja, que califican para los recursos educativos concedidos con la legislación del estado, Dream Act, y que también son elegibles para Consideración de Acción Diferida para los Llegados en la Infancia, mejor conocida como DACA, tienen sentimientos mixtos bajo Trump.
Algunos estudiantes están esperanzados, optimistas y listos para seguir adelante. Otros tienen miedo y no saben qué esperar. Pero en general, muchos están confundidos, dijo Encinas. Personalmente asustada por los estudiantes con los que trabaja, inmediatamente después de que Trump fue elegido. Ella sentÃa que necesitaba estar preparada.
“Yo no quiero causar pánico”, dijo Encinas. “No sabemos qué va a pasar y qué esperar, asà que siento que este es un tiempo para ser resistente, este es un tiempo para tener esperanza”.
Encinas dijo que la rhetorica polÃtica no ha mencionado nada sobre el futuro de los estudiantes, lo que nos deja en un juego de espera. Sin embargo, se siente prudentemente optimista.
“El no saber es lo que realmente tiene a nuestros estudiantes asustados y preocupados”, dijo Encinas. “Yo no dirÃa que nos hemos bajado nuestra guardia en respecto a nuestros sentimientos, nuestro miedo – pero permanece ahÃ, estamos en suspenso en este momento, literalmente. Si pudiera decir algo, estamos en suspenso ahora mismo”.
Los estudiantes como aquellos que pertenecen al grupo Lesbianas, Gays, Bisexuales y personas Transexuales, LGBT, también están pasando por temores similares de confusión.
“SÃ, hay miedo y nervios en todo el campus”, dijo Jessica Adams, coordinadora del Cross Cultural and Gender Center de Fresno State. “He tenido mucha interacción con la comunidad LGBT, han venido a mà con más preocupaciones”.
Adams, dijo que sin importar quien es presidente, los temores entre diferentes grupos de estudiantes siempre están ahÃ. La mayorÃa de los estudiantes temen por su seguridad personal después de lo que Trump prometió durante su campaña para crear un registro para los musulmanes y deportar a los inmigrantes indocumentados. Agregó que los temores crecen cuando las personas racistas se ven más valiente en el público.
“No estamos empezando desde el principio, eso es lo bueno”, dijo Adams. “(Estudiantes) tienen que confiar que nosotros vamos a estar ahà para protegerlos. Yo voy a projeter los estudiantes que están aquà cuando Trump está platicando de deportación y cuando él está hablando de asalto sexual”.
Adams dijo que el lenguaje usado por el nuevo presidente la enfurece. Ella dijo que el tema de la agresión sexual en el campus es algo que se siente bajo una nube de incertidumbre después de que el candidato de Trump para el secretario de Educación, Betsy Devos, no podrÃa comprometerse a seguir financiando recursos para las vÃctimas de asalto sexual en el campus. El centro actualmente emplea a una defensora de vÃctimas de agresión sexual.
“El potencial de perder a nuestro defensor de vÃctimas en el campus y perder la financiación del Title IX tiene un impacto negativo en el campus para todas las vÃctimas”, Adams dijo.
Ella agrega que aunque el estado de Fresno no puede experimentar casos extremos de asalto sexual, todavÃa pueden ocurrir y lo único que es incierto es como la universidad lo aborda.
Adams desea que la nueva administración sea más amigable y apoye a todas las comunidades por igual.
“Si queremos representar lo que se supone que es los EE.UU., ‘el lugar de la libertad’, entonces todo el mundo necesita ser tratado por igual”, dijo Adams. “Si los blancos no están dispuestos a admitir su propio privilegio, incluso cuando sean presidente de los EE.UU., nada va a cambiar”.
Traducido por Rebeca Flores